Una demanda récord de China, su bajo costo de producción, tolerancia a condiciones de sequía y altos precios hacen del sorgo el cultivo extensivo con mayor potencial de rentabilidad este año.
El año pasado su precio promedio osciló los $3.34 dólares por bushel pero este año ya rebasó los $6.40 dólares o $5,770 por tonelada. Actualmente se cotiza en $6,150 por tonelada en Guanajuato, prácticamente igual que el maíz blanco pero con un costo de producción 35% menor, dependiendo del nivel de tecnología y fertilización.
Su tolerancia a la sequía lo hacen una excelente opción en un año seco y caluroso como el que se preveé este año en las principales zonas productoras de México. Sin embargo, es sensible a los pH bajos del suelo. El sorgo también es una opción viable para la siembra en mayo y junio si las lluvias retrasan la siembra o cuando se rota con otros cultivos extensivos.
Con un costo de manejo agronómico bajo riego de $24,420 por hectárea, un precio de mercado de $6,150.00 por tonelada y un rendimiento de 12 ton/ha, el cultivo del sorgo se perfila como el más rentable esta temporada P/V 2021, por arriba del maíz, trigo, soya y algodón, entre otros.
En condiciones de temporal, y con semilla convencional (sin tratamiento o tolerancia al pulgón amarillo), su costo de manejo agronómico podría alcanzar los $20,000 por hectárea con rendimientos de 7 u 8 toneladas, sin tomar en cuenta los costos de translado.
El pulgón amarillo representa una seria amenaza para la producción de sorgo, ya que sólo necesita cinco días para reproducirse y causar fuertes daños. En México se registró por primera vez en el ciclo P-V 2013 en el norte de Tamaulipas y Guanajuato. Su mayor incidencia se presenta en las etapas tempranas del cultivo. Cada año afecta cerca de 60 mil has. y ya se encuentra distribuido en las principales zonas productoras del país, desde Tamaulipas y Sinaloa hasta Morelos, Michoacán y Guanajuato.
El monitoreo constante y el estableciamiento de umbrales económicos, que oscilan en los 50 pulgones por hoja, son de suma importancia para tomar decisiones sobre la aplicación de insecticidas y su manejo.
“Estamos recomendando los insecticidas más flexibles en su aplicación, que sean selectivos para que no afecten la calidad del grano y que sean amigables con la fauna benéfica”, señaló el MC Luis Angel Rodríguez del Bosque, especialista del Cerib-Inifap, en Tamaulipas.
La mejor alternativa de control la constituyen las estrategias preventivas que se pueden emplear a través del tratamiento a la semilla, del uso de variedades resistentes, y de las liberaciones de insectos benéficos desde las primeras etapas del cultivo.
En México se ha reducido la superficie por problemas de insolvencia, alcanzando sólo 1.5 millones de hectáreas con una producción superior a las 4.5 millones de toneladas. Este año se registra una disminución de 100,000 hectáreas de superficie en estados como Tamaulipas, que sólo sembrará 600 mil hectáreas por la insolvencia de agricultores y acopiadores.
Por otro lado, en USA, el USDA acaba de anunciar intenciones de siembra por más de 7 millones de acres, 20% por arriba del 2020.